HOMENAJE A CLAVÉ
Como habíamos anunciado, ayer por la mañana y
acompañados de las entidades corales de Barcelona, con sus senyeras, los orfeonistas de Graus rindieron homenaje a Clavé,
dedicándole una corona.
A las diez salió la comitiva, que era muy
numerosa, de la casa de los aragoneses, yendo precedida de una pareja de la
guardia municipal montada, de gran gala.
Acompañaban a los manifestantes el oficial de
la guardia urbana señor Merino y una comisión de la Atracción de Forasteros.
Por la calle de Pelayo y Rambla de Cataluña
se dirigieron al cruce de esta última con la de Valencia, donde se levanta el
monumento a Clavé.
Una vez allí, el presidente del Orfeón de
Graus, señor Castillón, pronunció un breve discurso, ofreciendo en nombre de la
entidad que preside una corona de flores naturales al fundador de los coros
catalanes.
El señor Roura en nombre de los últimos
agradeció el obsequio en brevísimas palabras, terminando como el orador que le
precedió con vivas entusiastas a Aragón, a Cataluña y a España, que eran
contestados con atronadores aplausos.
La corona que el Orfeón de Graus depositó al
pie del monumento a Clavé, era de flores naturales, con una preciosa cinta de
gro-seda en la que se leía: "Recuerdo del Orfeón de Graus a Clavé".
Terminado el acto, se dirigieron al Palacio
de Bellas Artes, pasando por el Paseo de Gracia y la Ronda de San Pedro.
Allí depositaron los estandartes y ensayaron
el conjunto de la composición Patria Nova.
CONCIERTO EN
BELLAS ARTES
No hay por qué insistir hablando
de los méritos del Orfeón de Graus, que todo el público ha reconocido
plenamente. No tenemos por qué dedicar un nuevo comentario a las obras que
interpretó ayer en el Palacio de Bellas Artes y que fueron las mismas de los
anteriores conciertos. Pero importa decir que el Palacio de Bellas Artes se
llenó de público y que el orfeón aragonés fue de nuevo aclamado, tributándosele
un definitivo homenaje.
El maestro Borguñó y sus coristas
pueden estar satisfechos. Por mucho que esperaran de la cortesía del público de
Barcelona, el recibimiento que aquí se les ha hecho y los aplausos con que se
les alienta para que persistan en sus nobles propósitos; seguramente han
superado a sus esperanzas. Ninguna realidad más halagüeña que ver rebosante de
público el Palacio de Bellas Artes, oír las ovaciones sinceras, vehementes,
efusivas, que oyeron ayer tarde. Esto es algo más todavía que el triunfo
esperado.
Interior del Palacio de Bellas Artes |
Cantó en su tercer concierto el
Orfeón de Graus lo mejor de su repertorio, y en honor suyo tomaron parte en la
fiesta la banda municipal, los Esbarts
Barceloní y Catalá de Dançaires, la Cobla Sureda y la Asociación Euterpense
de Coros de Clavé. El programa fue por tanto, abigarrado, con danzas y
canciones, entre las cuales destacó y levantó el entusiasmo de la multitud la
gloriosa jota, terminada con un ¡Viva
Aragón!
Hubo también el consabido
intermedio de tonadillas para las señoritas Sazatornil y López, teniendo ambas
que repetir algunas entre estruendosos aplausos.
Fueron éstos lo predominante de
la fiesta: muchos aplausos, muchas ovaciones, mucho vítores, mucho ruido de
victoria. Sus ecos llegarán a Graus y dejarán entre los sencillos montañeses
perdurable memoria.
La Vanguardia, 16 de octubre de 1916
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AL MONUMENTO DE
CLAVÉ
A las once de la mañana del día 15, partió el
Orfeón de Graus con su estandarte acompañado de los coros Clavé y orfeones
barceloneses con sus respectivas enseñas, desde el Centro Aragonés hasta el
monumento del eminente Clavé situado en la Rambla de Cataluña, formando
imponente manifestación.
Ofrenda a Josep Anselm Clavé, fundador del movimiento coral en España |
El presidente del Orfeón de Graus, señor Castillón, colocó una hermosa corona de flores en dicho monumento pronunciando sentidas frases de recuerdo al gran Clavé contestándole el Presidente de los coros Clavé con palabras de gratitud para nuestro Orfeón por el homenaje que tributaba al eminente catalán.
Desde allí dirigiéronse al Palacio de Bellas
Artes para depositar las señeras y estandartes de las veinte agrupaciones
corales que habían de tomar parte con el Orfeón de Graus en el gran concierto
que había de tener lugar por la tarde.
ALMUERZO
En el Mundial Palace nos reunimos en
fraternal banquete sobre cincuenta comensales, que los representantes de la
prensa, del Centro Aragonés, del Orfeó Catalá, Euterpe y Graciense, coro Clavé
e hijos de Graus dedicaron a las señoritas de nuestro orfeón representadas en
el banquete por las solistas Cecilia Egea, Conchita López, Pura Colón, Pepita
Sazatornil y Amalia Castillón.
Hotel Mundial Palace |
Pronunciaron elocuentes brindis el Presidente
de los coros Clavé, el simpático Dr. Lacalle por el Centro Aragonés e iniciador
de la ida del Orfeón de Graus a Barcelona, el señor Castillón, el eminente
Millet, el maestro Borguñó y algún otro que no recordamos. Fue una fiesta
íntima y simpática.
CONCIERTO EN EL PALACIO DE BELLAS ARTES
A las cuatro de la tarde del expresado día
15, en el magno Palacio de Bellas Artes, y ante un público inmenso que llenaba
completamente aquel espacioso local, tuvo lugar el gran concierto popular, en
el que tomaron parte los dansans
ejecutando bonitas sardanas, la banda municipal, los Orfeones Graciense,
Euterpe, coros Clavé, de Mosen Cinto, etc., resultando un acto solemne y
brillante y alcanzando nuestro Orfeón un exitazo enorme, siendo aclamado por
más de siete mil personas que aplaudían con entusiasmo a nuestro Orfeón, y a
las señoritas Sazatornil y López que cantaron muy rebién varias tonadillas.
El Orfeón cantando en el Palacio de Bellas Artes |
Excusamos decir, que tanto en este popular
concierto como en los anteriores, el maestro Director de nuestro orfeón don
Manuel Borguñó, fue objeto de delirantes y entusiastas ovaciones y
aclamaciones.
Fue un extraordinario acontecimiento la
ejecución de Patria Nueva por todos los Orfeones y Coros, con la banda
municipal, dirigidos por el insigne maestro Lamotte.
En uno de los intermedios, el Excelentísimo
Ayuntamiento de Barcelona que presidió la gran fiesta, se trasladó formando
brillante comitiva, desde el palco presidencial al proscenio, colocando el
dignísimo Alcalde señor Durán y Ventosa, después de pronunciar elocuentísimo
discurso, una magna corbata roja y dorada, con expresiva dedicatoria bordada en
oro, al estandarte del Orfeón de Graus, entre una incesante aclamación del
numeroso público que, levantado de sus asientos aplaudía y vitoreaba con
frenesí. El señor Castillón dio las gracias al Alcalde y Ayuntamiento de
Barcelona en nombre de nuestro Orfeón.
El Orfeón en el exterior del Palacio de Bellas Artes |
Fue un acto el de Bellas Artes, de los que
quedan grabados en los corazones de los espectadores por la solemnidad y
sublimidad del espectáculo. Allí se confirmó una vez más nuestro Orfeón en la
justa fama obtenida en la populosa y culta capital catalana.
EN EL ORFEÓ
GRACIENC Y EN LA SOCIEDAD
CORAL EUTERPE
Por la noche fueron invitados nuestros
orfeonistas a cenar con sus compañeros de los Orfeones Graciense y Euterpe y
después asistieron a sus respectivos locales, en los que dichas entidades
dedicaron un concierto a los gradenses e impusieron dos hermosas corbatas, una
del Graciense y otra del Euterpe, más una medalla y un diploma.
BAILE EN EL CENTRO
ARAGONÉS
El baile que el Centro Aragonés dedicó al
Orfeón de Graus, estuvo deslumbrante y fantástico. Mucha elegancia, mucha
alegría y mucha animación. Fue un digno final de fiestas y obsequios al paso
triunfal del Orfeón de Graus por Barcelona.
El Ribagorzano, 28 de octubre de 1916
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