Muchos espectadores no pudieron sentarse ni aun con adición de localidades. Todas fueron pocas.
El cabo primero fue magistralmente interpretado por las señoritas Pepita Sazatornil y Ángeles Pallás, haciendo la primera una tiple inimitable que cantó el aria y todos los números de la obra con el gusto y arte de una artista profesional. Ángeles, también cantó su papel con el esmero y la afinación de siempre.
Los señores Falches, López, González, Aguilar (Benjamín), Aguilar (José), Lleida, Auset, interpretaron como autores consumados sus respectivos papeles en los que cosecharon abundantes aplausos. [...]
Los rancheros señores González, López, Aguilar (B), Auset, Sazatornil y Ferrer, cantaron como los propios artistas de las grandes urbes. Muy bien el pelotón de los torpes formados por los populares jóvenes gradenses Ferrer (hermanos), Cosials, Egea, Turmo, Baldellou, Pera, Sazatornil, Salamero, Mur, Penilla, y algún otro que sentimos no recordar.
El coro de muchachas fue aplaudidísmo. Cómo no se había de aplaudir a las simpáticas y gentiles jóvenes Lorenza Martín, Cecilia Egea, Bárbara Miranda, Cándida Rami, María Sin, Pilar Bescós, Carmen Burrel, Laura Lloréns, Dominica Bruballa, Pura Colón y Severiana N. Todo el conjunto del Cabo primero fue admirable y digno de los orfeonistas que tomaron parte. El público quedó satisfechísimo de la filigranada labor de las actrices y actores. El maestro Borguñó dirigió como él sabe hacerlo.
Portada de la Partitura de El cabo primero, zarzuela de Manuel Fernández Caballero
En Me conviene esta mujer, obtuvieron merecidos aplausos la señorita Ángeles Lacambra y los señores Falches y López.
En Oratoria fin de siglo, inimitalbles los señores Lleida, Falches y López.
Oratoria fin de siglo, monólogo en verso y prosa de Antonio Jiménez Guerra
[...]
Reanudada la representación, cantaron varias canciones y tonadillas de verdadero renombre en este género modernista las ya aplaudidísimas canzonetistas señoritas Pepita Sazatornil y Conchita López. Ambas recibieron aplausos y ovaciones a granel en las tonadillas Los apaches, La billetera, La luna, La pena pena, Ninón y Margarita. Igualmente las aplaudidas jóvenes tonadilleras Lorenza Martín y Cecilia Egea, simpatiquísimas gradenses, interpretaron con mucho gusto las bonitas canciones La leñadora y La gitanilla, la primera, y La más pobre de la playa, la segunda. Ambas obtuvieron aplausos y olés a granel.
Un festival monstruo; una entrada archipampanante; el público satisfechísimo y con ganas de volver. Este es el resumen de la fiesta teatral del 14. Felicitaciones a todos y hasta la otra."
Extracto de la crónica de la velada teatral del 14 de septiembre publicado en El Ribagorzano del 30 de septiembre de 1914.
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